Crítica para todos. El chisme revolucionario, de Roberto Absenti.
Sikore Ediciones, 2012, primera edición, México.
Este primer libro de Roberto Absenti es una rica selección de sus
columnas más reflexivas, críticas e irreverentes sobre el medio literario -principalmente el de los poetas-, donde expone sin miramientos, vicios y
defectos de los personajes que le dan forma a nuestro contexto poético, tanto
de la torre (los de arriba) como de la cloaca (los de abajo). Roberto Absenti,
a igual que Heriberto Yépez, logra una crítica cruda, pero más aún: despotrica
contra todos, porque nadie a sus ojos está exento del error, que es, a fin de
cuentas, el que nos da contorno. La crítica "revolucionaria" de Absenti
es para la poesía, lo que la de Avelina Lésper es para las artes gráficas. Sin
temor a equivocarnos podemos ver este tomo, en mucha medida, equiparable al Caníbal de Julián
Herbert, aunque Roberto Absenti sea un caníbal irreverente, desfachatado, y en
ocasiones extremo, lo cual se compensa con su agudeza reflexiva; tanto es así,
que se ha creado ya un mito en torno a él, e incluso algunos piensan, creen,
que el tal Abenti no existe, que es a lo mejor un especie de Stephen
King de la crítica mordaz; la respuesta la da el propio Absenti cuando afirma:
"murmuran que no existo, pues me he vuelto un personaje, y que a estas
alturas importa muy poco si detrás de la máscara existe un yo. Pero puedo decir que irónicamentente, al
igual que dios, no existo, pero todos creen en mí".
Roberto Absenti demuestra con creces qué necesaria se ha vuelto la
crítica en un país tan hipócrita, en donde todos damos nuestra "mejor
cara" en complicidad mediocre, y en donde la vida literaria pasa como si
no pasara nada.
Adriana
Tafoya